El café, una bebida que sin dudas ha trascendido fronteras y culturas a lo largo de siglos.
Convirtiéndose en una parte integral de la vida diaria de millones de personas en todo el
mundo. Sin embargo, su relación con las variadas religiones ha sido variada, influenciada
por la historia, geografía y las distintas interpretaciones espirituales.
Para eso, comencemos este viaje en el Medio Oriente, remontándonos al siglo XV, el café
llego a la península arábica en este siglo, donde se convirtió en una bebida muy popular
entre los musulmanes. Se dice que los sufies, una orden mística dentro del Islam, utilizaban
el cafe para mantenerse despiertos durante largas sesiones de meditación nocturna. Esta
bebida tomó popularidad entre las ciudades árabes, donde existieron unas ‘’protocafeterias’’
llamadas Qahveh Khaneh, las cuales eran los lugares de reuniones sociales y de discusión
entre los musulmanes.
El consumo del café en el Islam fue aceptado en gran medida por los líderes religiosos,
quienes vieron el café como un medio para mantenerse despiertos durante oraciones y/o
actividades espirituales.
Aunque el Corán no menciona específicamente el café , su popularidad se extendió
ampliamente entre los musulmanes, convirtiéndose así en una parte integral de su vida
cotidiana en muchas comunidades islámicas.
Otro ejemplo aunque mas complejo, es el cristianismo donde la relación con el café ha sido
más ambigua. Aunque no hay ninguna prohibición específica en la biblia contra el café,
algunas denominaciones cristianas desaconsejan su consumo debido a su contenido de
cafeína y su asociación en algunos casos a hábitos mundanos.
Sin embargo en otras comunidades cristianas, el café se ha convertido en un elemento
central de la hospitalidad o la comunión, con Iglesias que ofrecen café después de algunos
servicios como forma de fomentar la camaradería y la comunión entre sus pares.
Hemos preguntado a algunos miembros de distintas denominaciones acerca de su opinión
del consumo de café y esto dijeron:
‘’Me gusta imaginar la idea de Jesús y sus discípulos alrededor de la mesa, en sus tiempos
de comunión, compartiendo un cafecito. Además, sólo un Dios infinitamente bueno hubiera
podido crear un fruto tan maravilloso para que podamos disfrutarlo’’
Rose Burgess, Teóloga Iglesia ACyM
“La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días cuenta con una ley de salud que
fue revelada a José Smith en 1833, para el beneficio físico y espiritual de cada uno de los
hijos de Dios, en esta ley se describen una serie de pautas que nos permiten llevar buenos
hábitos alimenticios para mantener nuestros cuerpos fuertes y saludables, enseña la
manera de mantener el cuerpo con el que nacimos en la mejor condición posible,esta ley
tiene el nombre de “La Palabra de Sabiduría” y su función principal es guiarnos para llevar
una vida saludable, evitando ciertos alimentos y bebidas como el café, el té y el alcohol. El
Señor nos ha prometido grandes bendiciones por guardar la Palabra de Sabiduría, Por
ejemplo, Él ha dicho que recibiremos salud en el ombligo y médula en los huesos y que
hallaremos sabiduría y grandes tesoros de conocimiento (DYC 89) y esto apoya la doctrina
de que el cuerpo es un don y es sagrado por lo tanto debemos cuidarlo.”
Melanie Figueroa, Miembro de La Iglesia de Jesucristo de los santos de los Últimos
días
‘’La iglesia adventista se rige bajo un régimen alimenticio donde cuidamos mucho nuestro
cuerpo, si bien no toda la iglesia en general lo sigue al pie de la letra gran parte si, el café es
considerado pecado, porque se considera un estimulante, si bien existen alternativas para
tomar café, como el café descafeinado. Pero existen muchas cartas que hablan acerca del
consumo de muchos alimentos que puedan influir en una buena alimentación.’’
Patricio Garrido, Ex Miembro de la Iglesia Adventista
Otro ejemplo es el de el movimiento Hare Krishna, si bien no tienen ninguna tradición
específica relacionada al café, es interesante explorar cómo está comunidad puede abordar
el tema.
Los Hare Krishna , a menudo practican una vida espiritual basada en principios de
vegetarianismo o veganismo, meditación y devoción a Krishna. En términos de consumo de
alimentos y bebidas, tienden a evitar el consumo de estimulantes y alimentos no
vegetarianos como parte de su práctica espiritual.
Algunos seguidores de Hare Krishna pueden ver el café como una bebida que no se ajusta
a los principios de pureza y satvica(bondad) que buscan llevar o mantener en su dieta
espiritual.
Conversamos con un miembro de la comunidad y nos comentó lo siguiente:
‘’Es importante entender que todo lo que existe en la naturaleza es sagrado, creación divina,
todo lo que nosotros comemos o consumimos es para agradecer a Krishna y entendemos
que todo en nuestra religión pertenece a Krishna, Él habla de las cosas que podemos y no
podemos comer, por ejemplo, nosotros no podemos comer intoxicantes. El café al tener
cafeína, que es un estimulante natural, no podemos consumirlo, ya que es un estímulo
externo que resulta adictivo, no solamente ocurre con el café, y por obvias razones no
consumimos esta bebida ya que tomar café esta relacionado a una debilidad para intentar
de tener energía o fuerza a través de un producto externo, por eso no consumimos ningún
tipo de estímulo que altere nuestra energía en nuestra conciencia. Solo a través de la
oración, obtenemos esta energía.‘’
Kavi Chandra, Miembro del Templo Hare Krishna de Valparaíso
En la tradición judía, el café ha sido ampliamente aceptado y consumido. No hay
prohibiciones religiosas específicas contra el café en la Torá, y el café se ha integrado en la
vida cotidiana de muchas comunidades judías en todo el mundo. En algunas festividades
judías, como el Shabat, el café puede ser una bebida popular para acompañar las comidas
festivas y las reuniones familiares.
“Nosotros como Judios no tenemos ninguna restricción con el café, por el contrario el café
siempre es algo que uno consume y es usual que en las comunidades se ofrezca café y
algo para comer después de los servicios religiosos matutinos, en particular porque es una
amplia costumbre entre los que usualmente van a rezar, comenzar el rezo en ayuna”
Ian Kreisberg, Miembro de la Comunidad Judía de Chile
La actitud hacia el café en diferentes religiones varía ampliamente, desde la aceptación
hasta la desaprobación, dependiendo de factores culturales, históricos y espirituales. Sin
embargo, en todas las tradiciones religiosas, el café sigue siendo una bebida que une a las
personas, fomenta la conversación y ofrece un momento de descanso y reflexión en medio
de las actividades diarias. El café trasciende las barreras religiosas y culturales para
convertirse en una parte querida de la experiencia humana, uniendo a las personas de
diferentes credos en torno a una taza humeante llena de conversación, amistad y, a veces,
incluso un toque de divinidad